Con estas premisas empezamos a trabajar en la idea, con el foco puesto en su producto estrella: el Atún Rojo Salvaje de Almadraba. Así fue como pensamos en recrear el viaje que el atún hace, desde el océano atlántico hasta el paso por las costas gaditanas antes de llegar al mar mediterráneo.

Desde la fachada, con una recreación de los atunes en libertad hasta la tienda simulando el copo de la almadraba con un techo lleno de cabos, pasando por el restaurante donde el cliente se sumerge en el mar, bajo un techo de madera para crear el efecto del mar en movimiento al paso de los atunes, todo ha sido diseñado hasta el más mínimo detalle.

En el restaurante se ha optado por un concepto de cocina showcooking, creando una gran barra de más de 13m de longitud. situando en su interior la cocina a la vista. De esta manera el cliente puede ver como se elaboran los diferentes platos cuidando al máximo el producto.

La tienda por su lado, fue concebida como un espacio boutique donde mostrar los diferentes productos comercializados por nuestro cliente en un entorno calmado y agradable. Se diseñaron muebles con forma de latas de conserva y una gran estantería partiendo del escudo de la firma. Todo el techo está recubierto de trozos de cuerdas colgantes y hemos cuidado la iluminación para acentuar los diferentes elementos.

Para crear un espacio único y exclusivo se diseñaron las mesas altas y el resto de mobiliario incluso en los baños. También quisimos distinguir el proyecto con unos cuadros utilizando la técnica japonesa llamada GYOTAKU